El pádel es un deporte de raqueta que se juega en pareja, generalmente en una pista cerrada de 10 metros de ancho por 20 metros de largo. La pista está rodeada de paredes, que son parte del juego, y se juega con una pelota similar a la del tenis, pero un poco más pequeña y con menos presión. Se juega con una pala especial, generalmente por parejas, y consiste, básicamente, en pasar la pelota a campo contrario por encima de una red, pudiéndose hacer rebotar la bola en las paredes durante el juego.
El pádel surgió en México en 1969, creado por Manuel Gómez, un empresario mexicano que, tras haber jugado al tenis, buscó una manera de adaptar el tenis a un espacio más reducido. Gómez diseñó una cancha más pequeña y cerrada, inspirándose en el formato de tenis, pero con paredes que podían usarse para devolver la pelota, similar al squash. En sus inicios, la modalidad se jugaba en una pista cerrada con paredes de ladrillo y la raqueta era una versión más pequeña y sólida que la del tenis, pero sin cuerdas. Gómez construyó la primera cancha en su casa en Acapulco, y fue allí donde empezó a popularizarse este nuevo deporte.